Hoy mis líneas van dedicadas a la mujer, aquella mujer luchadora, punche, chamba, mujeres coraje que con su amor y dedicación trabajan para tener un mañana mejor.
Recordemos que, desde hace más de 100 años, el 8 de marzo es un día que celebra los derechos conquistados por las mujeres en todos los ámbitos y conmemora la larga historia de luchas y sacrificios para conseguirlos. Es importante indicar que durante las jornadas y acciones de estas fechas las mujeres continúan reclamando la equiparación laboral y salarial, una presencia igualitaria en puestos de representación política, la exigencia de más políticas para detener la violencia de género. En definitiva, un empoderamiento completo de las mujeres en el marco de la sociedad actual.
Algunas cifras que es importante señalar es que según el estudio de la organización Mundial de la salud (OMS) sobre la “violencia de pareja y la salud de las mujeres” realizado en 10 países, el Perú se ubica entre los dos primeros lugares donde se ejerce mayor violencia en general contra las mujeres. A ello se suma el informe de Patricia Garrido, directora de la unidad de articulación territorial del programa Aurora, quien mencionó que al menos 23 mujeres fueron víctimas de feminicidio en lo que va de enero y febrero de este año. Existen casos de violencia frecuentes en mujeres jóvenes, adultas, así como en mujeres solteras o convivientes, muchas de ellas sólo tienen secundaria completa y no tienen trabajo remunerado. Los casos de violencia más comunes en el Perú es la violencia psicológica, seguido de la violencia física.
No resulta sencillo fijar un solo acontecimiento como el motivo por el que se escogió el 8 de marzo como el día internacional de la mujer, por ello se ha de entender como una lucha en conjunto, un esfuerzo prolongado en el tiempo. Así se entiende como cada generación ha ido heredando el deber de luchar por sus derechos y por las de las generaciones venideras. Hoy más que celebrar es un día para rememorar porqué debe estar vigente las acciones que dieron origen al 8 de marzo.
